Revised Common Lectionary - Daily Readings

Translate This Blog

Novela «El Terror de Alicia» Autor: Miguel Ángel Moreno Villarroel

Novela «El Terror de Alicia» Autor: Miguel Ángel Moreno Villarroel
Disponible en Amazon Kindle - Presiona sobre la imagen

Decimonoveno Domingo Después de Pentecostés - Sé un ejemplo cristiano a seguir

29 de septiembre 2024

Decimonoveno Domingo Después de Pentecostés.

Pastor: Miguel Ángel Moreno Villarroel

Lecturas: Salmo 19:7-14; Números 11:4-6, 10-16, 24-29; Santiago 5:13-20; Marcos 9:38-50

Tema de hoy: Sé un ejemplo cristiano a seguir.

Nuestra reflexión para el día de hoy decimonoveno domingo después de Pentecostés, está basada en el pasaje del evangelio que se encuentra en: Marcos 9:38-50 y es del contenido siguiente:

“Juan le dijo:

—Maestro, hemos visto a uno que expulsaba demonios en tu nombre, y tratamos de impedírselo, porque no es de los nuestros.

Jesús contestó:

—No se lo prohíban, porque nadie que haga un milagro en mi nombre podrá luego hablar mal de mí. El que no está contra nosotros, está a nuestro favor. Cualquiera que les dé a ustedes aunque sólo sea un vaso de agua por ser ustedes de Cristo, les aseguro que tendrá su premio.

»A cualquiera que haga caer en pecado a uno de estos pequeños que creen en mí, mejor le sería que lo echaran al mar con una gran piedra de molino atada al cuello. Si tu mano te hace caer en pecado, córtatela; es mejor que entres manco en la vida, y no que con las dos manos vayas a parar al infierno, donde el fuego no se puede apagar. Y si tu pie te hace caer en pecado, córtatelo; es mejor que entres cojo en la vida, y no que con los dos pies seas arrojado al infierno. Y si tu ojo te hace caer en pecado, sácatelo; es mejor que entres con un solo ojo en el reino de Dios, y no que con los dos ojos seas arrojado al infierno, donde los gusanos no mueren y el fuego no se apaga.

» Porque todos serán salados con fuego. La sal es buena; pero si deja de estar salada, ¿cómo podrán ustedes hacerla útil otra vez? Tengan sal en ustedes y vivan en paz unos con otros”.

***

La definición del término Sectarismo según la RAE es: «Fanatismo e intransigencia en la defensa de una idea o una ideología».

En nuestro pasaje del evangelio para el día de hoy, vemos a un Juan muy preocupado porque habían visto a una persona que en el nombre de Jesús, expulsaba espíritus de alguien poseído.

A ellos les pareció raro, injusto e ilegal que otras personas que adoraban al mismo Jesús que ellos adoraban, osaran siquiera mencionarlo en sus prácticas espirituales.

No, decían los discípulos de Jesús, esto no puede ser posible, para creer en Jesús, adorarlo como el Dios que es y orar en su nombre, la persona tiene que pertenecer a nuestro grupo cerrado, a nuestra iglesia y a nuestra denominación, porque sino, es un hereje a quien hay que denunciar ante las autoridades policiales y execrarle de la sociedad.

Esa malsana práctica de ser intolerantes ante personas que no pertenecen a mi “Iglesia Club”, deja mucho que desear en este mundo y mucho más en lo que respecta al destino eterno, así que debemos ser muy cuidadosos con eso.

¿Qué responde Jesús ante las pretensiones de Juan de hacer de su Iglesia un club exclusivo de un puñado de seguidores?

«No se lo prohíban, porque nadie que haga un milagro en mi nombre podrá luego hablar mal de mí. El que no está contra nosotros, está a nuestro favor».

Luego hace una advertencia a los líderes cristianos. Los conmina a tener cuidado con las predicaciones que hacen con sus testimonios de vida ante los niños; Jesús no habla aquí de lo que predicas con tu boca, sino con lo que se predica con el ejemplo diario.

Hermano. ¿Qué estás predicando con tu conducta a tus hijos, vecinos y amigos acerca del reino de Dios?

Recuerdo a un líder en exitología que solía decir: «así como usted es en un área de su vida, seguramente, así mismo será usted en las demás facetas de su existencia».

No pretendamos engañarnos a nosotros mismos y mucho menos pretendamos engañar a Dios; como dice en su Palabra: «Dios no puede ser burlado».

Para finalizar el pasaje de hoy, Jesús habla sobre las pruebas a las cuales debe ser sometido el cristiano, para luego poder llegar a ser un elemento atractivo de quienes vean su testimonio de conducta.

Hermano. ¿Tenemos el gusto, alegría y goce de vivir que procede de la comunión con Dios? ¿O andamos por esta tierra de los vivientes: llorosos, quejumbrosos, temerosos y enlutados?

Vivamos alegres y con el gozo del Espíritu Santo que mora en nosotros, dando gracias a Dios en todo momento; como dice Pablo inspirado por el Espíritu Santo: «Alégrense, alégrense siempre en el Señor»

Oremos

Hermanos, supliquemos a Dios Padre que, nunca pensemos que nuestra iglesia local es la única que tiene a Dios, respetemos a todos los cristianos en su profesión de fe y seamos ejemplos influyentes sobre la vida de los niños y de todos en general.

Amén. Dios los bendiga, y recuerden. ¡¡Sólo Dios Salva!!

 

Decimoctavo domingo después de Pentecostés - La humildad que proviene de Dios



22 de septiembre de 2024

Decimoctavo domingo después de Pentecostés

Pastor: Miguel Ángel Moreno Villarroel

Lecturas: Salmo 54; Jeremías 11:18-20; Santiago 3:13 - 4:3, 7-8a; Marcos 9:30-37

Tema de hoy: La humildad que proviene de Dios

Nuestra reflexión para el día de hoy Decimoctavo Domingo Después de Pentecostés, está basada en el pasaje del evangelio que se encuentra en: San Marcos 9: 30-37 y es del siguiente tenor:

“Cuando se fueron de allí, pasaron por Galilea. Pero Jesús no quiso que nadie lo supiera, porque estaba enseñando a sus discípulos. Les decía:

—El Hijo del hombre va a ser entregado en manos de los hombres, y lo matarán; pero tres días después resucitará.

Ellos no entendían lo que les decía, y tenían miedo de preguntarle.

Llegaron a la ciudad de Cafarnaúm. Cuando ya estaban en casa, Jesús les preguntó:

—¿Qué venían discutiendo ustedes por el camino?

Pero se quedaron callados, porque en el camino habían discutido quién de ellos era el más importante. Entonces Jesús se sentó, llamó a los doce y les dijo:

—Si alguien quiere ser el primero, deberá ser el último de todos, y servirlos a todos.

Luego puso un niño en medio de ellos, y tomándolo en brazos les dijo:

—El que recibe en mi nombre a un niño como éste, me recibe a mí; y el que me recibe a mí, no solamente a mí me recibe, sino también a aquel que me envió”.

***

En nuestro pasaje del evangelio para el día de hoy, vemos a un Jesús que reclama tiempo libre a solas y en paz para enseñar a sus discípulos.

Este es un ejemplo muy claro para los que se dedican a la enseñanza de la Palabra de Dios dentro de nuestras comunidades eclesiásticas; ya que, muchas veces vemos a individuos que, sin instrucción adecuada ni vocación demostrada, pretenden fungir como adoctrinadores correctos y sabios de quienes luego servirán como efecto multiplicador por todo el mundo.

Y se demuestran muy fácilmente sus carencias en virtud de que, todo lo hacen improvisado, apurados, desordenado y ladeandose en su mayoría hacia lo meramente humano o, buscando la aceptación y reconocimiento social. Suelen pensar «voy a hacerme maestro en esa iglesia y listo, subo en la escala social» dejando a un lado el amor y el sacrificio de Cristo Nuestro Señor en la Cruz.

Jesús necesita enseñar lo más pronto posible, porque, como les anuncia a sus seguidores, en breve será «entregado, asesinado; pero al tercer día resucitará». Y quienes heredarán el compromiso de anunciar sus buenas nuevas serán ellos mismos, así que, necesita un lugar tranquilo, solitario, para que se complete perfectamente el proceso de enseñanza tan importante que comprende la salvación de toda la humanidad.

Hermano. ¿Has sentido algunas veces que estando en el rol de la enseñanza cristiana, has fallado porque has errado en tu vocación? ¿Entendemos la importancia que significa enseñar las Buenas Nuevas de Nuestro Señor Jesucristo?

Cada persona que es enseñada en el evangelio, se convierte en un discípulo de Jesús y, la importancia sobre estos conocimientos no ha mermado a lo largo de los años; sigue siendo igual que en aquel entonces.

En la ilación de este pasaje, los discípulos parecen entender al igual que sucede hoy en día, que ellos están aprendiendo acerca del reino de Dios, solamente con el único objetivo de ganar jerarquía entre ellos, es decir ser el más importante, sentir esa satisfacción humana en sus mentes y en sus corazones, como si se tratara de un curso más sobre ventas del algún producto determinado.

Pero Jesús que es Dios omnisciente, los sorprende en su autoengaño, y les dice amorosa y firmemente con su revolucionaria enseñanza, que: «Si alguien quiere ser el primero, deberá ser el último de todos, y servirles a todos».

¡Pero no, yo no quiero ser el último, yo quiero y siempre querré ser el primero! Pensaría algunos de los discípulos por no decir todos.

Y, como nuestro Dios omnisciente escucha sus pensamientos, les regala otro ejemplo a ver si lo entienden de una vez por todas «El que recibe en mi nombre a un niño como éste, me recibe a mí; y el que me recibe a mí, no solamente a mí me recibe, sino también a aquel que me envió»

El hecho de recibir gustosamente a un niño en el nombre de Jesús, significa que esa persona se negó a sí misma; luego, habla de la humildad que ha recibido del Espíritu Santo y ha guardado fielmente en su corazón, entonces y sólo entonces, podrá considerarse a ese sujeto como el primero y más importante en el reino de los cielos.

Hermano, ¿has sentido que quieres ser el que más figura, primero en todo y más importante dentro de la Iglesia de Cristo?

Es tiempo de recapacitar y practicar lo que nos dice Jesús en su Palabra.

Oremos:

Roguemos a Dios Padre que, en todo momento nos acerquemos a la humildad que nos enseñó el que nació en un pesebre, murió por nosotros en una cruz y resucitó para darnos la certeza de la vida eterna junto a él.

Amén. Dios los bendiga, y recuerden. ¡¡Sólo Dios Salva!!


Decimoséptimo domingo después de Pentecostés - Una vida espiritual errática



15 de septiembre de 2024

Decimoséptimo domingo después de Pentecostés

Pastor: Miguel Ángel Moreno Villarroel

Lecturas: Salmo 116:1-9; Isaías 50:4-9a; Santiago 3:1-12; Marcos 8:27-38

Tema de hoy: Una vida espiritual errática

Nuestra reflexión para el día de hoy decimoséptimo domingo después de Pentecostés, está basada en el pasaje del evangelio que se encuentra en: San Marcos 8: 27-38 y es del siguiente tenor:

“Después de esto, Jesús y sus discípulos fueron a las aldeas de la región de Cesarea de Filipo. En el camino, Jesús preguntó a sus discípulos:

—¿Quién dice la gente que soy yo?

Ellos contestaron:

—Algunos dicen que eres Juan el Bautista, otros dicen que eres Elías, y otros dicen que eres uno de los profetas.

—Y ustedes, ¿quién dicen que soy? —les preguntó.

Pedro le respondió:

—Tú eres el Mesías.

Pero Jesús les ordenó que no hablaran de él a nadie.

Jesús comenzó a enseñarles que el Hijo del hombre tendría que sufrir mucho, y que sería rechazado por los ancianos, por los jefes de los sacerdotes y por los maestros de la ley. Les dijo que lo iban a matar, pero que resucitaría a los tres días. Esto se lo advirtió claramente. Entonces Pedro lo llevó aparte y comenzó a reprenderlo. Pero Jesús se volvió, miró a los discípulos y reprendió a Pedro, diciéndole:

—¡Apártate de mí, Satanás! Tú no ves las cosas como las ve Dios, sino como las ven los hombres.

Luego Jesús llamó a sus discípulos y a la gente, y dijo:

—Si alguno quiere ser discípulo mío, olvídese de sí mismo, cargue con su cruz y sígame. Porque el que quiera salvar su vida, la perderá; pero el que pierda la vida por causa mía y por aceptar el evangelio, la salvará. ¿De qué le sirve al hombre ganar el mundo entero, si pierde la vida? O también, ¿cuánto podrá pagar el hombre por su vida? Pues si alguno se avergüenza de mí y de mi mensaje delante de esta gente infiel y pecadora, también el Hijo del hombre se avergonzará de él cuando venga con la gloria de su Padre y con los santos ángeles”.

***

Casi siempre, es usado el ejemplo de que, si a un barco no se le marca un destino y se sueltan sus cabos, lo más seguro es que esa nave dé tumbos en varias direcciones sin salir del muelle, terminando con la mayor de las probabilidades encallada cerca de donde inició su travesía.

Por otro lado, si a la misma nave se le fija su itinerario, y se le señala un destino específico y claro; tenemos la seguridad que la misma no se dejará llevar por las órdenes que le den las olas, sino que con determinación, surcará las aguas hasta puerto seguro y confiable.

Se nota de ese ejercicio mental que, si uno conoce cuál es el objetivo, propósito de su labor y se identifica con éste, la actitud de compromiso y esmero en el mismo, será gratificante, provechosa y de gran calidad en su realización.

Para el día de hoy, observamos a un Mesías que conoce con exactitud y detalles, qué pasará con él y el modo en que lo llevará a cabo.

“...el Hijo del hombre tendría que sufrir mucho, y que sería rechazado por los ancianos, por los jefes de los sacerdotes y por los maestros de la ley. Les dijo que lo iban a matar, pero que resucitaría a los tres días”.

Y observamos a un discípulo que, pocos versículos antes había confesado por medio del Espíritu Santo que Jesús era el Mesías, es ahora lamentablemente atacado por Satanás; desviando la mirada de la misión de su Maestro, desconociéndola y negándola, porque ve el plan de Dios desde el punto de vista de los hombres, rechazando el plan de su Señor.

Luego, Jesús les ofrece a los discípulos, directrices de cómo deben conducir su vida de devoción y creencia.

«Olvídense de sí mismos y carguen su cruz, esto es, no sean egoístas y trabajen en la obra del Reino de Dios»

«No vayan detrás del resplandeciente brillo de los asuntos cotidianos, menospreciando la relación con su creador»

«Proclamen el nombre de Jesucristo, sin avergonzarse, para que en el día final él se enorgullezca de ustedes»

¿Has vivido momentos de dudas, confusión de no saber adónde vas?

¿Dudas de tus capacidades, de tu fe, de tus amigos?

¿Sabes lo que significa cargar la cruz?

Oremos:

Pidamos a Dios Padre que, en todo tiempo, pongamos la mirada en la vida que nos otorga la cruz de Nuestro Señor Jesucristo y, jamás sigamos el ejemplo de Pedro y su vida espiritual errática.

Amén. Dios los bendiga, y recuerden. ¡¡Sólo Dios Salva!!

Decimosexto domingo después de Pentecostés - La mejor visa jamás inventada



08 de septiembre de 2024

Decimosexto domingo después de Pentecostés

Pastor: Miguel Ángel Moreno Villarroel

Lecturas: Salmo 146; Isaías 35:4-7a; Santiago 2:1-10,14-17; Marcos 7:24-37

Tema de hoy: La mejor visa jamás inventada

Nuestra reflexión para el día de hoy decimosexto domingo después de Pentecostés, está basada en el pasaje del evangelio que se encuentra en: San Marcos 7: 24-37 y es del siguiente tenor:

“De allí se dirigió Jesús a la región de Tiro. Entró en una casa, sin querer que nadie lo supiera; pero no pudo esconderse. Pronto supo de él la madre de una muchacha que tenía un espíritu impuro, la cual fue y se arrodilló a los pies de Jesús. La mujer no era judía, sino originaria de Sirofenicia. Fue, pues, y rogó a Jesús que expulsara de su hija al demonio. Pero Jesús le dijo:

—Deja que los hijos coman primero, porque no está bien quitarles el pan a los hijos y dárselo a los perros.

Ella le respondió:

—Pero, Señor, hasta los perros comen debajo de la mesa las migajas que dejan caer los hijos.

Jesús le dijo:

—Por haber hablado así, vete tranquila. El demonio ya ha salido de tu hija.

Cuando la mujer llegó a su casa, encontró a la niña en la cama; el demonio ya había salido de ella.

Jesús volvió a salir de la región de Tiro y, pasando por Sidón, llegó al Lago de Galilea, en pleno territorio de Decápolis. Allí le llevaron un sordo y tartamudo, y le pidieron que pusiera su mano sobre él. Jesús se lo llevó a un lado, aparte de la gente, le metió los dedos en los oídos y con saliva le tocó la lengua. Luego, mirando al cielo, suspiró y dijo al hombre: «¡Efatá!» (es decir: «¡Ábrete!»)

Al momento, los oídos del sordo se abrieron, y se le desató la lengua y pudo hablar bien. Jesús les mandó que no se lo dijeran a nadie; pero cuanto más se lo mandaba, tanto más lo contaban. Llenos de admiración, decían: «Todo lo hace bien. ¡Hasta puede hacer que los sordos oigan y que los mudos hablen!»”

***

Imagine por un momento, que su hija sufre de una enfermedad que ni usted ni nadie sabe cuál es su origen. Usted se encuentra perdido, desorientado, vulnerable. Usted piensa «mi hija va a morir y no puedo hacer nada».

Luego, cuando ya usted está haciendo los preparativos para el entierro, repentinamente, un vecino le dice: —Mira por ahí anda un judío, profeta él, que dicen ha hecho milagros de curaciones. Si bien, nosotros pertenecemos a otra cultura y otra religión, no está demás hablar con ese señor. Amigo, creo que no tienes nada que perder.

¿Qué haría usted? ¿Se quedaría paralizado, y seguiría con los preparativos del sepelio de su hija o, iría y rogaría a ese sujeto que le han recomendado para que la sane?

Muy bien, el contexto de la historia es que, Jesús quería estar en soledad con sus discípulos e hizo algo raro en él, y se fue a tierras de gentiles, tierras de Tiro y Sidón, donde actualmente está ubicado el Líbano.

La mujer del relato acudió con fe a Jesús, se ve bien que la recomendación hecha por las personas y su gran fama, la habían convencido que él era el único camino que le quedaba por transitar.

Ahora bien, para el Señor, esta era una situación muy difícil en la que lo ponía la petición de la señora, ya que él había sido enviado a las ovejas perdidas de Israel y así, cumplir la promesa histórica de siglos hecha por Jehová.

Podemos pensar que, si Jesús hubiese empezado su ministerio en tierras de gentiles, tal vez se hubiese retrasado o frustrado el cumplimiento de su plan.

No debemos entender con la palabra «perros», que Jesús pretendía ofender a la dama necesitada.

Y la señora lo supo bien, ya que Jesús lo que daba a entender era que primero debía predicar a los hijos del pueblo de Israel y luego a los otros pueblos en general.

Jesús le dijo: por haber hablado así, vete en paz, lo que has venido a buscar se te ha concedido.

Y la pregunta curiosa e inquisitiva aquí es: ¿Cómo habló la señora? ¿Dijo Abracadabra? ¿Le mostró un amuleto para que se lo bendijera y con eso curaría a su niña?

Bueno, creo que la forma de hablar fue con total fe, autoridad y confianza en que iba a recibir solución de su Señor.

La siguiente historia nos habla de que le llevaron a Jesús, un sordo y tartamudo.

Hemos de precisar que Decápolis también era una región de gentiles; nuestro Señor Jesucristo predicó la Palabra en estos lugares y también realizó muchos milagros.

Jesús tomó aparte al hombre y con señas le enseña lo que va a hacerle, luego introduce sus dedos en los oídos y con saliva le toca la lengua, como haciendo una transfusión de fluidos divinos, desde su lengua hacia la lengua del tartamudo. Jesús utiliza la misma palabra que usó con la hija de Jairo «Efatá».

Jesús termina pidiendo al hombre que no mencione lo que había sucedido, pero como la gloria de Dios es indetenible e inexorable, más se corría acerca de la fama de Jesús.

La multitud se maravilla y dice: todo lo puede hacer bien.

Sí, Jesús todo lo hace bien.

Hermano, ¿tienes miedo de acercarte a Jesús? ¿Crees que Jesús lo hace todo bien? Quiero recordarte que por la promesa que hizo Dios a nuestro Padre Abraham, tú formas parte del pueblo de Israel. Sí, puedes decir confiadamente que tienes doble nacionalidad, y tienes la mejor visa jamás inventada, porque eres ciudadano del Israel celestial.

Oremos

Dios Padre eterno, te rogamos nos hagas entender que todos nosotros formamos parte de la ciudadanía del Israel celestial, para que de esta forma podamos confiar en tus pactos y promesas.

Amén. Dios los bendiga, y recuerden. ¡¡Sólo Dios Salva!!